miércoles, 11 de mayo de 2011

Japon de cuentos, castillos, flores y puentes































La llamada semana dorada que incluye casi tres dias de la semana, combinada con el fin de semana dio la oportunidad de visitar algunos sitios en los alpes japoneses. Takayama una pequeña ciudad con aires de antaño, aunque solo permaneceria un día terminé quedandome cuatro días,


Kamikochi sitio ideal para trekking en uno de los parques naturales mas bonitos de la zona oeste montañosa del país y Matsumoto contando con su majestuoso castillo como tesoro nacional.

domingo, 17 de abril de 2011

Dias soleados



Aproveche junto a amigas el sabado y disfrutamos de un dia de picnic en un parque en Shinjuku, capital de Tokio. Un parentesis en medio de la incertidumbre.

jueves, 14 de abril de 2011

Entre la paranoia y la negación de los hechos

Llegue ayer a tokio desde Buenos Aires, mas de 30 horas de vuelo y dos conecciones de avión, mas una parada técnica en Seoul. Es la primera vez que regreso a tokio en un vuelo que no estaba lleno, y esta vez solo regresaban japoneses y unos pocos extranjeros. Desde el aeropuerto intenté tomar el servicio de tren Narita express que generalmente me llevaba al centro de Tokio, desde donde seguía con el subte a la ciudad donde vivo, pero esta vez encuentro que el servicio se ofrece solo a la mañana y en la tarde, asi que debi tomar otro servicio, un bus hasta Shinjuku. Todo me parecía igual, salvo que veía a las persons mas serviciales que nunca. Casi no tuve tiempo para descansar, cuestión de reunirme con algunas personas de la universidad y estimar mis opciones. Tuve un día de adrenalina ayer, entre volver, reunirme con personas que también como yo dudan acerca de su permanencia en el país. Aun así, disfrute el día como pude. Estoy viendo opciones y no me encuentro contenta de estar aquí. Se que mi familia sufre cuando escuchan noticias de Japón y me pregunto si conviene continuar aquí o no. Algunas personas consideran que es paranoia el hecho de sentir temores o tener dudas acerca de la permanencia en el pais. En mi caso, considero que dejarse llevar por el miedo no trae buenas consecuencias y empeora la perspectiva. Sin embargo, encunetro también en muchas situaciones una terrible negación de los hechos y de las amenazas. Tal vez sea una defensa natural estar en negación de acontecimientos tan graves y extremos. Pero no quiero que esto tambien me suceda a mi. Mantenerse conciente de los peligros concretos como terremotos, tsunamis, radiación a veces no es ni siquiera una opción, es que la vida sigue y la negación es un mecanismo compun para afrontar hechos tan tragicos, como el numero de muertos o la falta de solución a los problemas de las plantas nucleares. Me pregunto si esto hubisese sucedido en uno de los llamados países subdesarrollados, no habría ya alarma generalizada y amplio consenso acerca de los peligros?. Me da miedo acostumbrarme a estar en ese estado de negación de la realidad, aunque también quiero escapar a la paranoia. No fue una decisión facil volver aquí, y no la recomiendo para ser sincera. Entre tanto, las informaciones que encuentro son contradictorias ante hechos tan contundentes, como los terremotos, las mas de 700 replicas, la desazón ante el fracaso de los planes de estabilización de las plantas nucleares y una fuente de riesgo adicional que se agrego la semana pasada con el nuevo terremoto y la planta nuclear en situación incierta. Los días previos a mi regreso a tokio fueron difíciles, en una semana tuve que decidir si volvía o no a continuar mis estudios, o abandonaba esta opción. Luego de hablar con amigos y familiares, había decidido regresar. Luego del último terremoto, cambio mi perspectiva y encuentro mayor el riesgo. Ahora estoy contemplendo cuales seran mis proximas acciones, ya que continuar estudiando en estas condiciones es poco razonable. La universidad donde estudio ya no esta repleta de jovenes, solo los arboles de cerezo guardan la imágen de primavera.

lunes, 14 de marzo de 2011

A salvo...en Berlin, aunque con la cabeza en Japón

Desde hace unos días salí de Japón de manera que no viví el terremoto y tsunami, continuo contactandome con compañeros, amigos y conocidos en Japón, asombrada de la tenacidad y la calma con que se ha vivido en general esta tragedia. Incluso, la mayoria de las personas con quienes me he comunicado no tienen intenciones de dejar el país. No se si se debe a la calma o a la desinformación. Es que las noticias y imágenes repetitivas que se muestran afuera de Japón no creo que sean similares a las del país, aunque algunos compañeros que se encuentran en Japón estan mas ansiosos cuando ven las noticias por internet de medios extranjeros. Así que aun me cuesta también sopesar y medir las consecuencias de lo sucedido,
El riesgo es incierto, de modo que postergo mi regreso al país.
Me informan conocidos que el area donde vivo, Mitaka, no fue muy afectada, que si en cambio el temblor se dejo sentir muy fuerte. Algunos estan preocupados por las proximas reprecusiones de temblores en el area y otros por los efectos de una posible radiación nuclear. Impensable hace solo cinco días que esto pasaría.
Estoy preocupada por personas que siguen allí, pronto comenzaran los cortes de gas y electricidad programados, aunque las personas con quienes me comunico parecen muy preparadas para la situación. La radio francesa fue muy pesimista esta mañana y la embajada francesa, de acuerdo a lo que me comentó una compañera de ese país, ha recomendado a ciudadanos dejar el país por unos días. Por su parte la BBC se mostró mas optimista acerca de la situación del peligro nuclear.
Algunas tiendas de provisión de alimentos cerradas, otras con personas comprando lo que pueden para abastecerse. Electricidad, gas y agus funcionando en Mitaka, donde vivo. También internet. Aunque se han anunciado cortes programados en los próximos días.

martes, 8 de febrero de 2011

El corazon contento


Puedo decir que me gusta Tokio. Valoro mucho mi independencia y la libertad que esta ciudad me ofrece. Todavia sigo encontrando personas y actividades que me interesan y esta ciudad tiene mucho por ofrecer, aunque me resisti un poco al principio ya me encanta lo que estoy viviendo y encontrar alegria incluso en una ciudad como Tokio, que a primera vista me parecia tan peculiar y fria, es un placer. Me gusta mi apartamento, vivir sola, conocer gente interesante en esta ciudad y emprender actividades nuevas.


domingo, 30 de enero de 2011

Templo Jindaiji, Mitaka

Estoy con suerte que cerca del lugar que rento hay un templo conocido como jindaiji, en las afuerras de Tokyo. Es un placer llegar a este lugar solo con la bicicleta y además los fines de semana se convierte en punto de encuentro de la población local, con tiendas ambulantes vendiendo comidas y objetos de arte.



viernes, 7 de enero de 2011






Hace poco Nicolas, de Argentina me hizo unas preguntas que tal vez le sirvan a alguien mas, las copie abajo

1) Con cuanto dinero tendria que contar como para sobrevivir a la busqueda laboral hoy en dia en Tokio, (alquiler, hotel, comida, transporte, etc) Desde que bajara del avion al llevar 1 mes alli.

Ten en cuenta que precisas justificar tu estadia y conseguir en la embajada de japon de bs as una visa, y para ello compruebas que tienes fondos,

Alrededor de 2000 a 2500 minimo dolares para un mes desde que bajas del avion, tomas el subte desde aeropuerto narita que te lleva a un alojamiento muy economico en las afueras de tokio, comes alrededor de 1500 a 2000 yenes por mes (alrededor de 20 dolares) algo barato,



2) Tengo por entendido tambien que a pesar de lo que se comenta que hablan ingles tambien, sueles ser muy pocas las personas segun algunas anecdotas escuchadas, me creo capaz de vencer la barrera del idioma, manejo ingles nivel medio y muy pocas palabras japonesas. Pero estoy trabajando en ello...

Trabaja en el ingles, que es fundamental aunque no hables japones. Pocos hablan ingles, pero orientarse en la ciudad requiere del ingles, las señales en general por ejemplo ademas del idioma japones tienen la traduccion al ingles. Ingles es lo basico en japon y en casi todos lados. Japones es un lujo para extranjeros, por la dificultad y el tiempo de aprendizaje que requiere. Imaginate que los japoneses en la universidad aprenden kanjis nuevos cada tanto.



3) Lo referente a lo legal y la busqueda laboral, tengo entendido (segun un informe en una revista de turismo) que con pasaporte argentino es mas que suficiente para entrar como turista, ¿pero podre conseguir trabajo asi?

No es asi,
precisas visa para trabajar,
podes conseguir visa de trabajo si alguien te hace propuesta para trabajar alla y comprobas en la embajad japonesa en bs as o visa de estudiante. visa de estudiante te permite trabajar part time unos meses despues de entrar al pais. Fijate becas de embajada de japon para carreras de grado,



4) Y por ultimo algun consejo de tu aventura por alli, del que hayas aprendido, ya sea desde como ahorrar con la comida o alquiler, que cosas indispensables necesito (celular, abrigo, vestimenta, mapas o gps, tarjetas de credito, etc.) Algun dato importante (como la referencia al saludar... etc)

Lo basico y lo que mas cuesta como persona de argentino o latina: Aca no esta bien confrontar o decir las cosas con crudeza o sinceridad, es preferible en general morderse la lengua, reprimirse un poco y no mostrar tus sentimientos. Nunca confrontar o decir en la cara las verdades, como nos gusta a nosotros los latinos. Aca se considera violencia.

jueves, 6 de enero de 2011

Fiestas en Tokyo






He pasado las fiestas de navidad disfrutando de un crucero desde la bahia de Tokio. Unos conocidos me invitaron a celebrar esta epoca de fiestas y organizaron una cena en uno de las salas del crucero. Buena comida, me sorprendio encuentrar mi nombre escrito en japones en una de las mesas, ademas las sorpresas no terminaban alli. De pronto escucho musica de mariachis en español y advierto que es uno de los organizadores japoneses que pidio la guitarra a uno de los musicos e improviso unas canciones " hay hay hay hay canta y no llores, porque cantando se alegra cielito lindo los corazones". No tuve mas remedio, cuando escuche la canción, que levantarme del sitio donde estaba cenando y unirme a los cantores, una pareja de japoneses que vivieron un tiempo en Mexico. Muy calida la reunion. se bebe mucho, ojo que es una costumbre de japoneses largar todo en una noche de bebidas, aunque estes disfrutando una cena con tus compañeros de trabajo o jefe. Ah si, yo no tome mucho. Maso maso. Es algo estresante los requerimientos de trabajo aqui para la gente local de modo que cuando se tiene un momento libre, las personas quieren disfrutar. Sali desde un sitio que se llama Kunitachi con un grupo de alrededor de 30 personas de Japón rumbo a la bahia, que esta mas o menos a una hora y media en colectivo. El viaje se hizo larguisimo. pero valio la pena. Disfrute bastante y es la primera vez que ceno en un crucero tan lujoso. Espero que seguir disfrutando, aunque lo del crucero no creo que se de mucho.

Singapur con aires de Tokio e India






Mi viaje desde Tokio a Singapur con Singapur airlines me deja en el aeropuerto de Changi. Desde el aeropuerto, tome un tren aéreo hacia la terminal dos para despachar la maleta. El aeropuerto de Singapur es muy moderno, con sitios de interacción virtuales, espacios de acceso gratuito a internet. Uno de los aeropuertos más modernos y equilibrados (entre el exceso y la moderación de ofertas) que encontré en mis viajes. Uno se siente como protagonista en este aeropuerto por los servicios interactivos que ofrece.
Solo me quedo dos días y una noche en Singapur, en vuelo de tránsito hacia Indonesia. Como de costumbre, no tengo reserva para la noche de estadía y resulta que es temporada alta por año nuevo. Me recomiendan un hostel en la oficina de atención al turista del aeropuerto. El hostel se encuentra en el llamado barrio “pequeña India”. Parece el karma que me tiene enganchada a ese país fascinante. Esta vez postergue India para conocer nuevos lugares, aunque me encontré con el barrio indio en Singapur y la isla de Bali que tiene población de mayoría Hindú.
Pequeña India en Singapur hizo de mi estadía un día encantador, los olores de las comidas, los deliciosos sabores como Naan con curry, multitud de tiendas de comidas, de tiendas, regenteadas por inmigrantes indios. Me quede mirando los pósteres de las películas de bollywood y escucahndo como un eco las canciones que sonaban en cada rincón, recordándome ese país inmenso y fascinante que es India. El hotel en habitación compartida costó alrededor de 20 dólares, con desayuno incluido. Pequeña India y el barrio chino son los lugares donde se pueden encontrar alojamientos con opciones económicas.
Al otro día, hago check out temprano en el hotel, luego del desayuno y trato de echar un vistazo a la ciudad. Uno de los rasgos de Singapur es la excentricidad de los diseños de los edificios, la ostentación de tiendas lujosas de las mejores y más caras marcas y los shoppings y ciudades mercantiles. Orchard Road deja conocer los más populares centros de compras y shoppings y es buena opción para cenar o almorzar. Luego de conocer la popular Orchand Road, tomo el subte, compro una tarjeta magnética como las que uso en Japón por casi 2 dólares, para dirigirme hacia la Bahía Marina (Marina Bay) que se encuentra a unas estaciones de subte desde Orchard. La Bahía es un sitio para reflejar postales de Singapur, los edificios altísimos y el reflejo de los colores de los mismos, el puerto, la estatua Merlión que una de las marcas de la ciudad.
Aprovecho para almorzar en un mercado de comidas cercano a la bahía, por supuesto que continué con Naan con curry, que delicias!
Me encanto la impresión de la ciudad, que combina modernidad con culturas locales de inmigrantes, parece muy pujante y atractiva para quienes están en busca de conservar la comodidad de las ciudades más modernas con el encanto de las culturas locales.

Singapur y Bali: 9 días de inspiración desde la Pequeña India en Singapur hasta la isla de Bali en Indonesia






Se trató de un viaje improvisado, decidido en dos días ante la imposibilidad de conseguir aéreos accesibles de Tokio (el país donde resido) a Buenos Aires (donde están mis seres queridos) en temporada alta de fiestas de Navidad y año nuevo. Aunque hubiese querido pasar las fiestas con amigos y familiares en Argentina, no me quedo más remedio que permanecer en Tokio o tomarme unos días afuera de Japón. Como no quería pasar año nuevo en Tokio, me pareció que cualquier otro sitio del sudeste asiático era una opción. Me pongo a buscar ofertas de aéreo y encuentro que Singapur de tránsito y Bali son buenas opciones. Así nació este pequeño viaje, entre la improvisación que ya es una constante en mi estilo de viaje y las posibilidades económicas que ofrecen las distancias cortas.


Bali inspira lejanía y bravura
El vuelo desde Singapur llega a Bali en la noche, hago la visa a la llegada y pago los 25 dólares que requiere el personal. A la salida del país también debo pagar 20 dólares. Esta vez tengo siete días antes de volver a Tokio. Llevo preparado certificado de fiebre amarilla porque a los latinos nos piden a veces, pero solo solicitan el dinero esta vez. Todo es muy rápido, el aeropuerto es pequeño, con pocos servicios, cuando salgo del aeropuerto busco oficinas de reservación de hoteles.
Como estoy en temporada alta, de fines de Diciembre al 5 de Enero, se complica conseguir alojamiento o eso me dicen. Las primeras dos oficinas de turismo no encuentran alojamiento acorde al precio que deseo, la tercer agencia se me hace una mejor oferta y consigo hotel por el primer día por 35 dólares y tres noches en otro hotel por 50 dólares. Uno de los hoteles se llama “Restu Bali” y está ubicado en la calle principal Legian St., donde hay mayor actividad económica, música electrónica, en fin mucho ruido. Aunque el hotel era muy apacible y con una piscina. Las playas de Bali atraen a muchos surfistas y a gente local sobre todo en período de año nuevo, el tráfico de las estrechísimas calles está muy congestionado y conviene caminar en vez de esperar horas para llegar en taxi. Hay muchas motocicletas que se adelantan a los autos sin ninguna consideración.
Las playas muy lindas, aunque pocas personas se meten al agua, la mayoría parecen surfistas, la playa es aquí un lugar de encuentro de amigos, familias, de desconocidos en busca de amistades, etc. Bali es un lugar para socializar, más que para buscar relax. Aunque algunos hoteles con todos los servicios ayudan a relajarse así como los servicios de masajes. Durante los atardeceres, pareciera que el color del agua se funde con el colorido de las nubes, formando como una especie de espejo reflejado por las últimas luces del atardecer. Hay algo distinto en estas playas que aunque no parecen tan espectaculares como las de Tailandia, si tienen un carácter muy fuerte envuelto de lejanía, algo de misterio y braveza en la niebla que asoma a veces en el ambiente.
El cuarto día me traslado al hotel Tres Hermanos, un sitio increíble repleto de espacios verdes, estatuas con motivos locales, jardines impecablemente cuidados, me habría gustado encontrar este espacio desde el primer día! Pago 40 dólares que valen la calidad del lugar.
La gente local es muy amable, y no encuentro acoso del cual leí en algunas partes. En cambio, encuentro calidez y amabilidad.
Bali me hace recordar a las playas de Kerala en India, aunque con más surfistas.
Bali no es solo playas, que se nota cuando visitas Bedugul o distintos poblados rodeados de montañas y terrazas de cultivos. En estos sitios se disfruta mayor tranquilidad, pocos turistas y parece un Bali distinto al de las zonas de playas. Me sorprendió la zona de Bedugul, con lago bellísimo y algunos templos alrededor. En Bedugul puedes visitar el templo Ulun Danu Bratan, construido alrededor del lago, lugar sagrado dedicado a la diosa del agua.
El templo de la familia real de Taman Ayun data del siglo diecisiete y es uno de los templos más bellos de Bali. Otra panorámica bellísima ha sido Pacung con plantaciones naturales y el monte Batukaru de custodia. Otro sitio precioso y con pocas personas que lo visitan es Alas Kedaton, donde puedes pasear alrededor de un templo magnifico entre jardines poblados con monos amistosos y murciélagos. Otro sitio imperdible es el templo marino de Tanah Lot, que es la postal de Bali que aparece en todos lados. El sitio es imperdible realmente y cada lugar mencionado inspira quedarse al menos un día en cada uno, aunque hay tours que por 30 dólares te ofrecen recorrer todos estos sitios en un día muy largo.
Me voy con ganas de haber tenido más días para disfrutar de cada sitio en Bali, pero solo tenía una semana donde privilegie relajarme en vez de andar corriendo de un sitio al otro. Esta vez tengo que volver a Tokio, donde seguiré planeando el próximo viaje. Me quede con muchas ganas de visitar Borobudur, por ser un templo budista muy importante ubicado en la isla de Java. Pero en cada viaje no se puede recorrer todo y es lindo guardar las ganas de conocer sitios para la próxima vez. Al menos, es la mejor excusa para volver. Me sorprende que siga encontrando los ecos de India en distintos lugares (esta vez en pequeña India en Singapur y la atmósfera en Bali), aunque sin planearlo. Me sigue un deseo, tal vez sea un próximo destino.

Mis ojos sorprendidos en Japón: paraguas para el sol, tablas de surf, budas gigantes, perros con ropa y calzado, fetichismo a la luz del día


Desde hace medio año resido en Tokio y aunque mi motivo principal de mi estadía en Japón no es viajar, no puedo perderme la curiosidad de conocer más acerca del país a través de viajes cortos.
A veces encuentro mucha desmesura en los estilos, en la opulencia de los edificios y los centros de compra, etc. Aunque saliendo un poco de la ciudad de Tokyo, empezaba a ver otras características como la delicadeza en las formas, la previsión y el cuidado en los detalles. No podía comprender como se conciliaba tanta desmesura con el cuidado en los detalles. Espero que algunos viajes por el país me ayuden a comprender un poco más. En todo caso, me interesaba ver como el manejo de los tiempos permite pasar desde conglomerados de edificios inmensos y espantosos hacia el fetichismo y la sutileza de los formas.
Empiezo por un sitio casi desconocido por extranjeros y que es una pequeña joya turística en Japón. Se trata de Shirahama, me he encontrado con personas japonesas que no conocen el sitio.
Playa perfecta en Japón?
El verano en Tokio es caluroso y muy húmedo, incluso me animo a decir que la combinación calor y humedad es más intensa que en Buenos Aires. En la oficina del Gobierno en Shinjuku encontré folletos con fotos increíbles de una playa. Es la playa de Shirahama.
Así que luego de visitar Kyoto, decidí hacer dos horas y media de viaje para llegar a Shirahama.
En la estación de trenes hay una oficina de turismo. Aunque no hablan inglés ni español, hacen todos sus esfuerzos en ayudar. Además me dieron un mapa para que pueda encontrar el hotel luego de bajar del bus. Tenían todo organizado y previsto como siempre aquí en Japón. Así que si llega un turista despistado sin reservaciones ni que hable japonés, de alguna manera se hacen entender y te facilitan las cosas.
Me consiguieron hospedaje en un hotel por 3500 yenes la noche. El hotel estaba muy bueno y amplio, de estilo japonés. Solo el salón para bañarse era compartido, el hotel ofrecía gratis las instalaciones de aguas termales. Desde Kioto viaje por tren expreso a Shirahama, una pequeña ciudad en la costa de la provincia de Wakayama, en la costa este de Japón. El boleto costó alrededor de 4500 yenes desde Kioto a Shirahama.
Shirahama es una de las playas más populares entre los habitantes de Osaka y Kobe y las ciudades más cercanas. No solo pude relajarme en la playa exquisita, además hay varios Onsen (baños de aguas calientes) que son famosos porque aparecen en textos antiguos. Me encanto el onsen al aire libre Sakino Yu ya que esta sobre el pacífico y tienes la sensación de estar en las aguas del pacífico mientras te relejas con tus baños de agua caliente. Aquí te sacas la vergüenza ya que las piletas con aguas de los Onsen son compartidas y debes quitarte toda tu ropa, nada de biquinis o trajes de baño. Enfrente del Onsen se veía un barco carguero, cuestión de olvidarse que uno es el centro del mundo y volver a la realidad de que a nadie le interesa que te estés bañando sin ropa.
Me enamore de esta pequeña ciudad, los poblados aledaños tienen playas muy bonitas, de colores azules profundos y mas tranquilas. El color del agua de esta playa torna de Turquesa a verdoso, es muy limpia la playa y no tiene nada que envidiarle a otras playas como Bali, que visite recientemente. Es como una porción de Tailandia en Japón, lo cual es asombroso.

Kyoto:
A primera vista, pareciera que no hay encanto en esta ciudad. Una mirada más cauta deja sin ninguna autoridad a esta primera percepción. En vez de viajar con el Shinkansen o tren bala que cuesta alrededor de 170 dólares solo ida, decidí tomar un autobús nocturno desde Shinjuku, Tokyo y llegar a la mañana a la ciudad.
Esta vez las imágenes tienen mucha más fuerza que el relato, así que espero que disfruten la cantidad de fotos de Kyoto.
Kamakura
Esta ciudad balnearia es una buena excursión desde Tokyo, es posible ir por el día y acceder a las atracciones principales de Kamakura. Aunque para los más exigentes, tal vez dos días sean precisos para conocer un poquito más y disfrutar de las preciosas playas.
Esta ciudad fue la capital de Japón entre 1185 y 1333. Kamakura es pequeña y se llena de turistas y visitantes sobre todo los días de semana.
Una de las mayores atracciones es el Daibatsu o gran Buda, que es impresionante, inspira mucha paz y relajación, me quede contemplándolo un buen rato. Conocer el daibatsu era uno de mis mayores intereses del viaje a kamakura.
Desde la estación de Kamakura tomé un tren local hasta la estación de Kita-Kamakura, desde donde se puede cubrir algunas atracciones caminando y se accede además a las playas. Ademas de las playas muy bonitas, agua muy caliente durante el verano de Japón, tienes cerca lugares tradicionales de Japón.